lunes, 19 de diciembre de 2011

Campismo en el Club Vasco de Camping Elkartea

Durante estos últimos años el campismo ha evolucionado de forma radical. La oferta de camping se ha incrementado y se ha diversificado de forma que, además del lugar, se puede elegir el tipo añadiendo a los atractivos naturales del entorno, las propias instalaciones.
La acampada libre.-
Todavía quedan lugares en los que se permite la acampada libre y responsable. Cada Comunidad Autónoma tiene sus propias leyes. Para hacer acampada libre cualquiera que sea el albergue móvil: tienda, caravana o autocaravana, es necesario descartar una serie de lugares prohibidos en todo el Estado: en los núcleos urbanos, en las proximidades de los ríos, en las proximidades de los lugares de captación de agua, en los lindes de las carreteras. Tampoco se permite en muchas autonomías superar un número determinado de elementos y de personas por acampada. Es necesario consultar las leyes propias de cada autonomía para conocer cuales son las limitaciones de la acampada libre o acampada itinerante, puesto que se suelen complementar con otras prohibiciones. Algunos reglamentos obligan a superar una distancia determinada entre el lugar de acampada y un camping abierto o limitan el tiempo de permanencia. En todas ellas se obliga también a respetar la propiedad del terreno. Hay otras prohibiciones que se imponen por seguridad como la de acampar debajo de las líneas eléctricas de alta tensión y en los cauces secos de las torrenteras.
Muchas CCAA disponen de espacios protegidos o parques naturales donde, con determinadas condiciones, se permite la acampada libre y responsable. En cualquier caso, no está de más recordar que hay otra serie de limitaciones escritas que todos debemos tener siempre en cuenta como son la recogida de residuos, no hacer fuego, no verter en los cauces fluviales residuos de aguas jabonosas o fluidos de derivados de la combustión de automóviles. En definitiva, un respeto muy riguroso con el entorno.
Los camping.-
La estancia en un camping es una forma de acampar en contacto con la naturaleza que tiene muchos adeptos. A veces son las instalaciones del propio camping las que proporcionan atractivos adicionales, como grandes piscinas o piscinas climatizadas, animadores de juegos para niños y para adultos, instalaciones deportivas. En definitiva, auténticas ciudades de vacaciones. En estos lugares se puede llevar el propio albergue móvil: tienda, carro, caravana o autocaravana o alquilar el albergue en el propio camping.
Hay una oferta muy extensa pero para tener seguridad de disponer de un lugar entre el 15 de Julio y el 15 de Septiembre, es necesario hacer la reserva con antelación. Las tarifas y los servicios ofertados varían mucho en función de la temporada. Muchos camping ofrecen también descuentos por ocupar una plaza toda la temporada. Los precios habituales se componen de un precio por persona, adulto o niño y día, elemento de acampada y electricidad. Sobre todo en Francia hay una oferta “forfait” que comprende la parcela incluyendo dos adultos, los elementos de acampada y la electricidad. Algunas veces el aspecto ofrecido en Internet o en folletos de propaganda o los servicios anunciados no coinciden con los reales. En caso de no conocer el camping con antelación, es mejor asesorarse por quien haya estado o visitar personalmente el lugar antes de contratar una reserva. Hay diferentes foros de usuarios que con seguridad van a facilitar información de una gran cantidad de camping.
El turismo en autocaravana.-
Otra forma de hacer campismo mas cerca del turismo itinerante es viajar en una autocaravana aprovechando que este medio proporciona los dos elementos necesarios: vehículo y albergue. Una autocaravana es un automóvil que ha sido construido con el propósito de servir de alojamiento. Como automóvil está únicamente sometido a las leyes de tráfico en lo concerniente a circulación y estacionamiento.Club Vasco de Camping: Camping/Caravaning
Cualquier lugar bonito, tranquilo y seguro es suficiente para pernoctar y hacer una etapa. Es necesario diferenciar qué es estacionar y qué es acampar. En el Estado Español las CCAA tienen sus leyes propias sobre acampada y, por regla general, la acampada libre está prohibida en todas ellas. Como hemos informado al principio, lo que está permitido es la llamada acampada itinerante sometida a grandes limitaciones. La autocaravana, cuando está acampada está sometida a las mismas limitaciones que el resto de los albergues móviles, sin embargo, como automóvil, puede estacionar en las vías públicas de forma legal y si no despliega elementos de acampada, sigue estando estacionada aunque esté habitada.
En otros países de la CEE, se define claramente en sus leyes de seguridad vial, que es acampada y estacionamiento, precisando que una autocaravana descansando sobre los neumáticos, sin colocar calzos o estabilizadores, en una plaza de estacionamiento autorizado, sin desplegar elementos de acampada como toldo, mesas o sillas y sin derramar líquidos procedentes del habitáculo está estacionada aunque sea habitada.
El campismo en nuestro club.-
Estas son tres formas básicas de hacer campismo, nuestro club desea revitalizar la tradicional sección de campismo acogiendo las iniciativas que demanden los socios, incluso, para conocernos sería magnífico realizar una acampada anual que puede ser en Primavera o en Otoño en un camping, el primer año, de una provincia limítrofe.
Para conocer cuantos socios estarían interesados en recibir información o participar en las actividades de la sección os agradeceríamos que os dirigierais a secretaría por carta o por correo electrónico dándonos a conocer la forma de contactar, que elemento de acampada utilizáis y que tipo de actividades os gustaría practicar dentro del campismo, así como contactos con otros socios para hacer salidas y una buena terapia de grupo.
Texto: Arsenio Gutiérrez Labayen
Sección de campismo

Manual para campistas despistados

El verano se acerca, y los destinos, las ofertas son mayores para aquellos dispuestos a quedarse en un camping
Texto: Arsenio Gutiérrez
Pocos se lo planteaban como alternativa hasta hace no mucho, pero el campismo es ahora cada vez más popular. Ya no son sólo mochileros sin un duro, sino familias, jubilados, parejas jóvenes los que están descubriendo los atractivos de quedarse en un camping, y sentirse libre, itinerante, como un nómada.
Ahora, hay muchos detalles que hay que dominar para disfrutar de la experiencia plenamente.
En toda Europa ya hay una abundante oferta de hostelería al aire libre. Los camping proponen de todo, desde sosiego y contacto con el entorno, hasta ajetreo y diversión.
Las opciones incluyen desde cabañas rústicas o bungalow, hasta parcelas para instalar tiendas, caravana. Los servicios complementarios disponibles pueden ser también muy variados, pero los más frecuentes son piscina, restaurante y supermercado. Algunos disponen de juegos de agua, animadores profesionales para los niños, sala de fiestas o medios para practicar deportes al aire libre.
La situación del camping puede ser el factor decisivo de selección: playa, campo o montaña. Basta consultar una guía o un buscador en Internet para comprobar la oferta.
Una mochila y una tienda de campaña son suficientes para desplazarse recorriendo países, pero la autocaravana es la opción más sofisticada del campismo itinerante. Entre ambos extremos hay también muchas alternativas.
La tienda de campaña es el habitáculo más sencillo y económico, y el primer elemento de acampada de muchos campistas.
La ventaja principal es su bajo coste; sus mayores inconvenientes, aparte del trabajo de montar y desmontar, es el poco aislamiento térmico que proporciona, lo que la hace apta para período estival, sea una simple canadiense de dos plazas o las que tienen pabellones separados con habitaciones y “cuarto de estar”.
En lo que los entendidos llaman “campismo de “tela”, el carro-tienda es un paso adelante. Consiste en un remolque que se engancha en el vehículo tractor y que despliega una tienda. Representa una ventaja sobre las tiendas clásicas a la hora de montar y desmontarla, y al no estar directamente en el suelo, suponen una mejora de comodidad y protección.
Tienen capacidad para entre dos y cuatro personas. Algunas disponen de suplementos donde se pueden alojar dos personas más. El costo varía de 2.400 a 4.800 euros.
Las caravanas disponen ya de más comodidades. Las menores, un comedor convertible en dormitorio, y una cocina. Las mayores pueden tener tres ambientes, baño, ducha, WC, frigorífico, calefacción y agua caliente. Depende del precio y del tamaño.
Como vehículo, se podría definir una caravana media, como un remolque de unos cuatro metros y medio y unos 900 kilogramos de peso.
El nivel de equipamiento dependerá de las posibilidades económicas del campista y del tipo de campismo que le guste practicar. Televisión digital vía satélite, generador eléctrico y aire acondicionado son equipamientos que se encuentran en muchas caravanas.
Algunos campistas pueden pasar todo el verano disfrutando en un solo camping como si se tratara de un apartamento; pero otros, lo que les gusta es el turismo itinerante, recalar en camping distintos y recorrer el entorno en coche, estacionando libremente cuando el lugar o las circunstancias lo permiten.
Con el carné de conducir B se puede arrastrar una caravana que no exceda los 750 kilogramos. En todo caso, no debe sobrepasar el peso del vehículo tractor ni la suma de ambos debe superar los 3.500 kilogramos. Si no, será necesario disponer del carné B+E.
El uso de caravanas motorizadas o vehículos automóviles acondicionados como vivienda se remonta a los inicios de la historia del automóvil. En la década de los sesenta comenzaron a aparecer unos furgones autónomos montados sobre mecánica de Volkswagen: los camper. Se trata de furgonetas como las de reparto de mercancías, acondicionadas para hacer vida en ellas. Disponen de techo elevado fijo o elevable, cocina, lavabo, frigorífico, cama y cama supletoria en el techo. De los fabricados en serie, Wesfalia ha sido la fábrica alemana que más unidades ha acondicionado sobre furgones Volkswagen y Mercedes.
El modelo California Coach y el Marco Polo sobre Mercedes Vito son, con diferencia, los más vistos. Su precio ronda los 33.000 euros. Se les puede instalar muchos accesorios, entre ellos calefacción estática a gasoil.
Hay otros tipos de furgones acondicionados que pueden incorporar lavabo, ducha y WC. En la actualidad se ofrece, dentro de este grupo, un nuevo tipo de serie denominado “Van”, que se monta sobre mecánica Fiat Ducato (resulta un vehículo de 5,40 de largo por 1,95 de ancho por 2,5 metros de alto). Sus cualidades son la facilidad “rutera” y su discreción. La primera oferta la hizo una fábrica eslovena, Adria, aunque en la actualidad varias marcas la están incorporando a su catálogo, entre ellas la española Moncayo. Su precio ronda los 33.000 euros.
La mayor ventaja de los furgones con techo elevable es la posibilidad, por sus dimensiones, de ser utilizado como vehículo familiar.
Pero las autocaravanas representan un avance en cuanto a comodidad en el habitáculo. Son los vehículos ideales para el clásico rutero. Además de desplazarse por carreteras y autopistas con la seguridad de un vehículo de su clase, son autónomas, ideales para el campismo libre. Disponen de cama o camas, lavabo, ducha, WC, cocina, agua caliente, frigorífico y calefacción. Tienen prevista la recogida las aguas residuales del lavabo y ducha y disponen de WC químico.
Por su forma se pueden distinguir tres tipos, la mas vista, “capuchina”, sitúa la cama fija principal, en una mansarda, encima de la cabina. También puede utilizar la mesa y asientos de comedor como cama auxiliar y disponer opcionalmente de literas sin que su longitud se dispare. El mayor problema que plantea es su aerodinámica. La altura total rebasa fácilmente los tres metros con longitudes entre los seis y siete metros.
El tipo de autocaravana más vendida actualmente es la “perfilada”. Sobre un chasis rebajado se sitúa el habitáculo, aunque conserva la cabina original. La parte superior de la cabina se convierte en una buhardilla. Generalmente llevan una cama fija posterior. Las dimensiones típicas rebasan ligeramente los seis metros y su altura entre los 2,60 y 2,70 metros aunque algunos modelos pueden llegar a los tres.
Finalmente, casi siempre en la gama superior, están las “integrales”. Estos modelos solo conservan el motor y el chasis del vehículo tractor original. Todo el resto es el propio habitáculo incluida la cabina. La forma exterior está desprovista de aristas de forma que tiene mejor comportamiento aerodinámico.
Una característica de este tipo de autocaravanas es que disponen de una cama situada en el techo de la cabina, en el sentido transversal, que se coloca encima de los asientos del conductor y copiloto para dormir. Otra es que los sillones del conductor y copiloto rotan hacia el interior incorporándose al comedor.
Estos tipos incluyen los mayores modelos. Los tamaños más frecuentes oscilan entre los seis y medio, y los siete metros y medio. Algunas marcas ofertan en sus catálogos unidades con un garaje interior para llevar motocicletas e incluso las hay que pueden albergar un coche compacto. Los precios van desde los 52.000 euros hasta varios cientos miles.
Para conducir una autocaravana típica solo se necesita carné tipo B.
Si se observa el mercado, la tendencia de las matriculaciones de autocaravanas es más dinámica que la de los coches. Francia, en el año 2002 matriculó mas de 3.000 unidades y su parque se acerca a las 40.000; Alemania, Países Bajos e Italia manejan cifras similares. Nuestro país está muy lejos de alcanzar esos números aunque el crecimiento es también prometedor.
En todo caso, España es un mal destino de vacaciones para esta masa potencial de turistas. En general, las infraestructuras que se encuentran en gasolineras y áreas de servicio de las carreteras decepcionan, y muchas veces no hay donde llenar del depósito de agua, vaciar las aguas usadas, o limpiar del WC químico.
Entretanto, otros destinos como Francia, Italia e incluso Portugal ofrecen, generalmente, más amplios y mejores servicios.
Además, a este lado de los Pirineos, por desgracia, es frecuente contemplar al autocaravanista como un caradura que utiliza servicios sin pagar, cuando la realidad es muy diferente. Frente a pequeños abusos que puedan cometer personas aisladas, el autocaravanista es normalmente una persona comprometida con el medio ambiente, tiene poder adquisitivo y respeta las normas. Alimentos, restauración, combustible y servicios son los bienes que consume en la misma o mayor medida que otros turistas.
Y eso que las normativas no lo facilitan. Una de las asignaturas pendientes es crear y unificar criterios sobre estacionamiento y pernocta. Las autocaravanas están sometidas a una reglamentación dispersa, a veces contradictoria, gravándoseles con impuestos y no ofreciéndoles los servicios correspondientes.
Algunos ayuntamientos se apresuran a pasar las cuotas más altas de Impuesto de Circulación, equiparando las autocaravanas a turismos de lujo, mientras otros prohíben la circulación en determinados paseos e incluso en todo el casco urbano, aplicando erróneamente las leyes sobre acampada.

Aparcar, pernoctar o acampar

Texto: Arsenio Gutiérrez
Al norte de los pirineos lo tienen bien claro. El concepto del turismo en libertad ha multiplicado la matriculación de autocaravanas, y cada día es mas numeroso el grupo de personas que, a bordo de una autocaravana o furgón acondicionado, disfrutan de la posibilidad de desplazarse rápida y libremente, utilizando la autonomía de estas viviendas rodantes para realizar etapas y conocer lugares.
Al borde del mar, en un barrio de una ciudad, en un camping o en una zona de montaña, disfrutando de un cielo sin contaminación lumínica, cualquier lugar razonable es ideal para descansar antes de continuar la ruta.
Actualmente, cualquiera de estos países: Francia, Holanda, Italia o Alemania, multiplican por diez el parque de autocaravanas de España. En parte es debido a que, en torno al beneficio que origina este tipo de turismo, se han creado una serie de servicios para atraer a los autocaravanistas.
En estos países, muchas ciudades disponen de aparcamientos específicos dotados de los servicios auxiliares básicos: toma agua, servicios sanitarios, electricidad y vaciado de aguas usadas; muchas gasolineras disponen también de tomas de agua y de vaciado de aguas usadas, y todas las autopistas y algunas carreteras disponen de áreas de descanso preparadas.
El panorama en nuestro país es muy diferente: ausencia de servicios y aparcamientos, y, sobre todo, una persecución extrema por parte de algunos ayuntamientos.
Debemos recordar y difundir que una autocaravana o “vehículo vivienda” es, como vehículo, un furgón con elementos de vivienda integrados en el chasis capaz de transportar personas, sometido a ITV y abonando el impuesto de circulación, por lo tanto, con derecho a aparcar en cualquier lugar autorizado a otros vehículos de similar tamaño y capacidad. Que si ocupa una plaza autorizada durante la noche, y no tiene desplegados elementos de acampada, como toldos, estabilizadores, mesas, está estacionado, independientemente de si hay o no personas pernoctando en su interior.
Es lógico que las autoridades municipales impidan la presencia continuada de autocaravanas en zonas especialmente sensibles, como paseos marítimos y zonas comerciales, pero también es exigible que prevean zonas alternativas de estacionamiento.
Las normas de aparcamiento en las ciudades están reguladas por los Ayuntamientos en virtud del artículo 7 de la Ley sobre Tráfico (RD 339/1990). Las competencias de los ayuntamientos sobre regulación de aparcamiento no pueden dar lugar a abusos de derecho, como el del Ayuntamiento de Santiago de Compostela, que prohíbe aparcar autocaravanas en todo el ámbito municipal.
Finalmente, un buen autocaravanista sigue unas normas de conducta que le avalan como responsable:
  • En las ciudades o medio urbano, deben elegirse lugares de estacionamiento:
      • De baja intensidad de población.
      • Donde no se obstaculice la visibilidad ni la práctica del comercio.
      • Que no constituyan un obstáculo para la circulación.
  • La utilización de la autocaravana como vivienda debe efectuarse en estos lugares:
      • Sin sacar al exterior elementos de acampada.
      • Sin molestias para los vecinos.
      • Sin monopolizar el espacio público.
      • Vigilando los animales domésticos para evitar la posible suciedad.
  • La evacuación de las aguas sucias se efectuará en lugares apropiados como áreas de servicio e instalaciones sanitarias públicas.
Atención: Las redes de aguas pluviales (alcantarillas) no pueden ser utilizadas para el vaciado, ya que no se les aplica a todas un tratamiento de depuración. Durante el trayecto, deberán cerrarse todas las válvulas de evacuación de aguas.
Las basuras domésticas deben almacenarse en bolsas y depositarse en los lugares adecuados.
La aplicación de estos principios contribuye al respeto de los demás, a la preservación del medio ambiente y a la buena acogida de los usuarios de autocaravanas en las regiones visitadas.
¡Buen viaje